Prima cosa bella

Tropezar con una lágrima y convertirla en sonrisa. Transformar una expulsión en una aventura. Divertirse mirando de frente a la muerte.

Me gustan las mujeres que ríen, las que sonríen. Me gustan también las mujeres que lloran. Imagino que tengo predilección por aquellas cosas que yo no consigo hacer con facilidad.

Pero las mujeres que me vuelven loco, son las que saben llorar y reír a la vez. Hoy he vuelto a saber, viendo esta película, qué es lo que más me gusta de ti.

La historia de una familia que se reune y se perdona, el relato de los desencantos y las sequedades, amoríos, desamores, canciones contra el miedo y el tiempo que pasa ineludible para todos.

Conmovedora la cama con los tres abrazados en diferentes edades. Conmovedora la pelea-abrazo de los hermanos. Conmovedor el vecino, amando en silencio y cuidando de las cosas como si en ellas estuvieran descansando las emociones.

Pero no es una película sobre el amor, ni sobre la familia, ni sobre el perdón. Esta película, pisando el borde del drama, habla a gritos de la alegría.

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